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Se presenta en esta tesis Doctoral algunas reflexiones en torno a la praxis educativa universitaria que ha predominado desde siglos pasados hasta hoy, así como los retos ante la reconstrucción de esta praxis desde una nueva concepción, subrayando la importancia de la ética y la reflexión como alternativa capaz de dar respuesta a una educación pertinente a la realidad social. Dicha Tesis se ha fundamentado en la teoría de la nueva sociología de la educación (1971) siguiendo la corriente filosófica social de Schütz (1964). La investigación tuvo como intencionalidad la comprensión de la cotidianidad de la praxis de vida del docente universitario, desarrollándose bajo el paradigma interpretativo, unificando dos de sus métodos: fenomenología y hermenéutica. Se abordó a un docente, quien a través de relatos de sus vivencias nos fue sumergiendo en la cotidianidad de su praxis, develándose tres eventos naturales identificados como: Vocación, formación y experiencia docente, denominados en esta tesis: andamiaje de la acción educativa, desplegándose de éstos una serie de sinergias, cuya correlación develó un evento emergente: la ética reflexiva con su. Sobre estos eventos se construyó la teorización enfocada a una acción educativa ética-reflexiva que emerge de momento, en el momento preciso en repuesta al otro y en busca del bien común. Por consiguiente, se presenta esta Tesis como una reflexión acerca del sentido y significación de la acción educativa, de la cual todos somos responsables (docentes, estudiantes, universidad, familia, instituciones en general) y que requiere de una función experiencial, pedagógica-constructiva y deliberativa relacionada con la ética. |
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